Néstor Gorosito llegó a Alianza Lima con la misión de enderezar el rumbo y pelear por el título. Una de sus características ha sido la constante rotación del plantel, buscando que la mayoría de los futbolistas tengan minutos y demuestren su valía. Esta filosofía ha sido, en general, bien recibida por la hinchada, que ve cómo el técnico busca opciones y alternativas partido a partido en el Torneo Apertura.
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Sin embargo, en el universo blanquiazul hay un nombre que genera una mezcla de intriga y preocupación: Bassco Soyer. Este joven mediocampista, considerado por muchos como una de las perlas de la cantera íntima, parece haber desaparecido del radar del primer equipo bajo la dirección de "Pipo" Gorosito.
Soyer es un futbolista con proyección. Ha mostrado destellos de su calidad en las pocas oportunidades que ha tenido anteriormente. Su habilidad con el balón, visión de juego y capacidad para romper líneas son características que entusiasman al hincha aliancista, siempre ávido de ver a sus canteranos triunfar en el primer equipo. ¿Por qué, entonces, un jugador con este potencial no está siendo considerado?
Bassco Soyer junto a Jesús Castillo (Foto: Alianza Lima).
La expectativa por verlo en acción era alta, sobre todo considerando que el calendario aprieta y las lesiones o rotaciones abren espacios. El reciente partido contra Cienciano, por ejemplo, parecía un escenario ideal para que un jugador joven como Soyer tuviera, al menos, algunos minutos y mostrara de qué está hecho. No fue así. El talentoso volante no solo no entró al campo, sino que ni siquiera estuvo en la convocatoria final.
La verdad detrás de la ausencia de Bassco Soyer va más allá de una simple decisión táctica o de preferencia del entrenador. La razón principal es contractual. Según fuentes cercanas al club, el jugador aún no ha firmado la renovación de su vínculo con Alianza Lima.
Esta situación ha generado un distanciamiento. Mientras no haya un acuerdo, el club parece haber tomado la determinación de no utilizarlo, una práctica común en el fútbol para evitar el riesgo de lesiones en un jugador que podría irse libre. Es un limbo doloroso tanto para el jugador, que ve frenada su progresión, como para el club y el hincha, que no pueden disfrutar de su talento.
La situación es aún más compleja si se considera que Soyer tampoco está teniendo continuidad en el equipo de reserva, que compite en la Liga 3. Esto significa que un futbolista en plena etapa de desarrollo no está acumulando minutos de juego en ningún frente, algo crucial para su crecimiento profesional.
Alianza Lima reserva (Foto: Alianza Lima).
Desde mediados de año, Bassco Soyer estará habilitado para negociar y firmar un precontrato con cualquier otro club. El tiempo apremia para Alianza Lima si desea retener a una de sus jóvenes promesas.
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La situación de Bassco Soyer es un recordatorio de las complejidades en la gestión de los talentos jóvenes en el fútbol peruano. Un jugador con potencial "borrado" de las canchas no por bajo rendimiento, sino por una pugna contractual. Veremos si las partes logran acercar posiciones o si Alianza Lima termina perdiendo a una figura que prometía ser importante en el futuro blanquiazul. ¿Podrá el hincha íntimo volver a verlo brillar con la camiseta que ama? Solo el tiempo (y las negociaciones) lo dirán.
12/05/2025
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