
Para poner contra la espada y la pared, Agustín Lozano le propuso a Ricardo Gareca renovar su contrato con una cláusula que indicaba que solo les pagaría premios al comando técnico y a los jugadores, si obtenían la clasificación al Mundial 2026.
El presidente de la FPF quería que el ‘Tigre’ tome una decisión por todos, y así enfrentarlo a los futbolistas. Sin embargo, su plan maquiavélico no tuvo éxito. Apenas se enteró de los términos propuestos para extender su vínculo, el entrenador argentino cortó toda comunicación con el mandamás de la Videna.
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En esas condiciones, se incluía la cantidad de profesionales de su staff técnico y aceptar la reducción del 40% de su salario. Gareca captó rápidamente que la intención del directivo no era retenerlo en el cargo, sino dinamitar su proceso con una serie de obstáculos.
Un momento difícil de olvidar para Lozano, fue cuando el ‘Tigre’ no lo mencionó para nada en su conferencia de despedida. “No lo puedo negar. Lamentablemente las cosas se dieron así. ¿Dolió la omisión? Desde luego, soy un ser humano como cualquiera que le puede doler, pero tampoco para molestarme o incomodarme”, precisó el mandamás de la FPF.

12/05/2025

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